13 de abril de 2010

Mamerías




Por Acidonitrix



El infierno de Santos

El doctor Juan Manuel Santos, pese a su seráfico apellido, se apresta a enfrentar un verdadero infierno en su pretensión de ser presidente de Colombia. Lo persigue un pasado confuso tanto suyo como de su familiar el vicepresidente Francisco Santos, el 'Pachito' de este gobierno, que olímpicamente pasó de fumador de sus 'cachitos' en Holanda a ser ahora un adalid de la guerra contra las drogas.

Cuando dicen los políticos, perdón, los putripolitiqueros, 'que la política es dinámica' sólo lo hacen para disimular sus cambios de postura. Para ocultar que sus motivos fueron bajos y aceitados por coimas, contratos y repartijas del erario público. O por una sed desmedida de poder, en lo cual nuestro candidato de la U es un buen ejemplo. Adornado de cinismo y una 'memoria acomodaticia' que le permite, por ejemplo, acusar a los demás de favorecer zonas de despeje y olvidar que él fue quien la concibió, propuso y diseñó. ¡Ah! Y participó en su ejecución. Eso, claro está, se trata de los momentos en los que tenía 'relaciones amistosas' con Raúl Reyes y con los paramilitares, a quienes en otro momento buscó para organizar un golpe contra Samper.

En ese mismo intento en el que él fue uno de los impulsores y, en el que, por su negativa a participar, fue asesinado el Dr. Álvaro Gómez Hurtado. No quiere esto decir que Santos haya promovido su asesinato, pero al menos si deja la duda de que se trata de alguien que ha coincidido con 'amistades peligrosas'. Y que Santos es un personaje que aplica al pie de la letra la consigna de 'el fin justifica los medios', como lo hizo cuando acusó al hoy candidato liberal, Dr. Rafael Pardo, de tener relaciones con las FARC. O, como parece serlo, surgen del seno de su campaña los ataques en la red acusando a Pardo de ser el candidato de la guerrilla. Infundio apenas apropiado para cretinos en política.

Como ministro de defensa es tristemente célebre por los 'falsos positivos', eufemismo con el que se , denominan crímenes de lesa humanidad cometidos por fuerzas oficiales. Y aunque desesperadamente tratan de evitarlo sus aliados políticos, más temprano que tarde estará en el centro del debate por el escándalo de las coimas entregadas por la empresa alemana Ferrostaal AG para 'aceitar' el negocio de los buques con destino a la Armada Nacional. Como igualmente tendrá que responder por el uso de material de guerra (un helicóptero cuyo desplazamiento por hora cuesta cinco mil dólares) para paseos vacacionales de sus hijos y los amigos de los babies.

Igualmente, no está muy lejos el día que deba responder también por el escándalo de las chuzadas del DAS y otro tipo de interceptaciones ilegales; la falsa demanda contra el Almirante Gabriel Arango Bacci; la destitución irregular de mandos militares para tapar el escándalo de los muertos de Soacha y otros cientos más; el escándalo de la fosa común de La Macarena, donde reposan más de dos mil 'ene enes', muchos de los cuales son dirigentes comunitarios de los Llanos, etcétera.


Como se ve, el palmarés de Santos es muy alto, pero, desgraciadamente, relacionado con hechos que desdicen de la majestad del cargo de primera autoridad de la nación.

¿Puede acaso un ciudadano honrado, que conozca estos hechos, votar por semejante candidato a la presidencia de la República?

Difícil que alguien que se diga digno, demócrata y tenga elevados valores ciudadanos apoye con su voto al Dr. Juan Manuel Santos.

¿Usted lo haría?



La seguridad en las encuestas

El Consejo Nacional Electoral se está inmiscuyendo indebidamente en las encuestas. Nadie puede dudar de la seriedad de las que se realizan... Un claro ejemplo es el de Datexco, que repitió la encuesta... hasta que aparecía ganándola Juan Manuel Santos.

Sí: es que definitivamente hasta en eso se tiene que engañar a la gente. Porque la encuesta de Datexco la ganó Mockus, pero había que ocultarlo al pueblo.

¿Ven por qué a las encuestas que se realizan en el país no se les puede prestar mucha seriedad?



2 comentarios:

Lully dijo...

Es disfrutado de esta lectura que tiene verdades absolutas.

Un abrazo!

Anónimo dijo...

UN PAÍS CON ENCUESTAS AMARRADAS PARA ENGAÑAR A LA GENTE. UN PAÍS MANEJADO CON FALSOS SENTIDOS DE SEGURIDAD, MIENTRAS LA GENTE PERMANECE 'SECUESTRADA' DEL MIEDO A SALIR A LA CALLE, EXPRESAR SU PENSAMIENTO, RECLAMAR LOS DERECHOS.
VAYA PAÍS...