5 de febrero de 2009


Por Acidonitrix


Algo va de....

Un motivo de reflexión es la actitud del presidente Barack Obama ante los errores cometidos.  Por ejemplo, con la designación del secretario de la Secretaría de Salud, Tom Daschle, quien se había demorado en el pago de impuestos (140.000 Dls).  Ojo: demorado.  No que se hubiera apoderado de.... por ejemplo, miles de millones de pesos en acciones de Ecopetrol, con documentos falsos y prevalido de sus influencias políticas.



Barack Obama


El presidente Obama aceptó la responsabilidad por el error y llevó a que el candidato depusiera de sus aspiraciones.

"Creo que metí la pata. Asumo la responsabilidad y vamos a asegurarnos de que lo reparemos para que no pase de nuevo", añadió.

En otras latitudes ―tropicales, para ser más exactos― la respuesta hubiera sido diferente.  Primero, nombramiento tal vez como ministro de Gobierno, o Asesor Presidencial, o jefe de de algún instituto descentralizado o de alguna entidad de seguridad nacional u otro cargo, y sostenerlo contra viento y marea, así la dignidad nacional sea pisoteada.

La importancia de ser Barack Obama y no un Parac Obama. Definitivamente algo va de Pedro a Pablo.

 

En todas partes se cuecen habas....

Al teólogo Joseph Alois Ratzinger, o mejor, el papa Benedicto XVI se le está complicando la rehabilitación del obispo británico Richard Williamson, quien después de 20 años de excomunión de la iglesia católica acaba de ser rehabilitado. Hecho que no gustó a los judíos, porque el obispo Williamson niega el holocausto contra el pueblo judío (más de 6.000.000 de asesinados) y sólo reconoce unos 300.000 muertos ―al parecer por indigestiones―.  Hasta la canciller alemana le protestó a la Iglesia.





El obispo Williamson niega la existencia de las cámaras de gas....

Por lo visto Benedicto XVI ha tenido que exigirle al obispo de marras que se retracte. Cosa que no ha querido hacer. Eso fue, indudablemente un olvido de Joseph Alois, porque no creo que haya sido motivada por su pertenencia a las juventudes hitlerianas ni a las fuerzas armadas del III Reich.

¡Líbreme Dios de tal pecado de pensamiento!   

4 de febrero de 2009



Por Koestler

Las innovaciones papales

La iglesia católica no deja de ser sorprendente.  En ocasiones se le pega a la rueda de la historia ―según sus intereses― como cuando unció su carro al de Constantino, el emperador romano, y se volvió religión del imperio.  Un buen gana gana para ambos, pues le brindaba al imperio una herramienta de unificación.  El hisopazo católico bendecía las tropelías del poder. Y el poder le abría las puertas para que se expandiera e impusiera sus creencias.

Y a lo largo de la historia ha sido su constante operativa.  Con el poder, no importa la razón.  O en otros casos, con los imperios.  Como durante las guerras, en especial la segunda guerra mundial, cuando mantuvo un malicioso sentido de neutralidad frente a los crímenes de Hitler.  Y nuestro papa ―mejor el papa de ahora― el alemán Joseph Ratzinger, más conocido como Benedicto XVI, buen amigo del genocida George Bush, ha dado unos pasos muy interesantes.



Podríamos decir que hasta innovadores. Veamos.  A lo largo de la historia de la iglesia, los promotores de cismas eran excomulgados, alejados del seno de la Iglesia, y el excomulgado se perdía.  O se retractaba o se hundía inexorablemente en los infiernos.  No había escapatoria.  Pero con Benedicto XVI la cosa cambia.  Los cismáticos ultraderechistas de la Asociación San Pío X, fueron reincorporados al seno de la Iglesia.  No porque se arrepintieran de sus posiciones cismáticas, sino porque la Iglesia ―la que siempre tiene la razón― cambió su punto de vista.  Y lo que aparenta ser una medida ultra reaccionaria de este papa, en el fondo es revolucionaria. 

Innovadora porque significa que muchas de sus visiones doctrinarias pueden modificarse y adaptarse a los cambios.  Por algo se empieza.  Ya veremos a Arriano y a todos sus seguidores desocupar el infierno y subir a la diestra de Dios padre.  ¡Y lo que falta por ver!   Porque hay quienes no ven con buenos ojos al papa.

Tampoco es para que se burlen así....